14 de mayo de 2014

52 SEMANAS, 52 PALABRAS: SEMANA 20: MARIPOSAS




Justo en el mismo instante en que mi hijo nos dejaba para siempre, una mariposa blanca bajaba desde la ventana de la habitación donde estaba hospitalizado y se posaba en la cara de mi esposa durante breves instantes para regresar después a la misma ventana de la que había partido.

Algo extraordinariamente excepcional. Pudo hacerlo en cualquiera de nosotros, pues estábamos esperando noticias entre familia y amigos,  muchísimas personas. Pero él, porque no me cabe duda de que se trataba de él, quiso despedirse de su madre de esa forma tan hermosa.

Tal vez sea una casualidad, seguramente seré víctima de mi ceguera, no lo sé, pero si sé que con posterioridad, en ocasiones señaladas, una mariposa blanca ha rondado siempre cerca de nosotros. 

Reedito para vosotros este haiku, con la única intención de que sea expresión de un amor, el suyo, que seguimos sintiendo cada día.

Dejó en su frente,
la mariposa blanca,
polvo de estrellas.

Más historias de mariposas en el blog de nuestra amiga Sindel

14 comentarios:

  1. Pepe ¡qué preciosa y reconfortante experiencia, no lo dudes, era él.
    Un abrazo muy fuerte.

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  2. Sí, yo también creo que era él. Y siempre los acompañara...

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  3. Ay Pepe ! ¡qué preciosura ! Yo creo en estas manifestaciones que son señales de Dios. La mariposa es tan bella , tan delicada... Por algo la llaman "Pájaro del alma".
    Me he emocionado , es muy lindo lo que has escrito y perdona que te diga . Estoy segura que se posó sobre el rostro de su madre. No quiero significar con esto que el amor de la madre es más grande o más importante, que el del padre. ¡de ninguna manera !
    Que esa mariposa blanca ilumne el alma de ustedes y les acaricie el alma.
    Besos de luz.
    ¡Buen descanso !..

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  4. No tengo palabras, me emocioné hasta las lágrimas, es una historia muy conmovedora y triste, pero que deja un halo de paz en las alas de esa mariposa blanca, alma que viene a anunciarse cada tanto y los cuida.
    El haiku es maravilloso como todo lo que escribis.
    Gracias por acompañarme y por compartir con nosotros estas cosas que llegan al alma.
    Un abrazo inmenso.

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  5. Muy emotivas tus palabras, y coincido con los demás que ciertamente era él. El haiku es preciosísimo! Fue un placer leerte.
    Saludos

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  6. Me has emocionado, hasta las lágrimas. No tengo dudas de que efectivamente era él!
    Maravillosa manera de decirles que los amaba y seguía su existencia.
    Un fuerte abrazo!
    =)

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  7. Me conmueve mas allá de acá tu relato amigo Pepe. Con mi esposa (no puedo evitar decirlo) fuimos a buscar de algún modo a un paraje cercano para descansar bajo el cielo por unos días; pese a que estamos bastante provistos de naturaleza donde vivimos; llevando a nuestro hijos fallecido con nosotros (como bien sabe el que ha vivido esas pérdidas). Cada vez que salíamos aparecía (fuera de temporada) muy cerquita nuestro una mariposa hermosa color verde muy clarito, nos sobrevolaba y se apoyaba muy cerquita................... creo que imaginarás que las palabras entre nosotros eran innecesarias..... ¡era Ignacio! Que siempre estará... pero duele mucho.... GRACIAS POR COMPARTIR PEPE... disculpa el tal vez exceso de palabras, pero no pude evitarlo..... UN ABRAZO!

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  8. Lo he tenido que volver a leer, la primera vez con la vista nublada y anegada era difícil. Precioso el haiku y la experiencia, cada vez que vea una mariposa blanca os recordaré con cariño. Un abrazo

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  9. Pepe cuando Toñi me lo contó me sentí conmovida, igual me ha pasado al leerte. Seguro que esa mariposa era él y seguirá siempre a vuestro alrededor. El haiku es bello.

    Besos para ti y para Toñi.

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  10. ¿Que comentar? La belleza de tu entrada me deja sin palabras y solo noto el hormigueo en mis ojos, que luchan por no escribir un comentario de lágrimas.
    Un abrazo.

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  11. ¡Pepe! No tengo dudas que es así, como lo trasmites, porque así también nosotros nos vamos con una emoción que tiene que ver con lo mas sublime, un amor que nunca se irá.

    Un abrazo.

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  12. Estremecedora historia, contada con la emoción inevitable y leída también con emoción.
    Es bonito asociar un ser querido ausente con una mariposa.Una poética visión que alivia el dolor de lo perdido.

    Gracias por trasmitirnos íntimas emociones.

    Un abrazo.

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  13. Pepe, también yo estoy emocionada, amigo...Me encantan las mariposas blancas, siempre nos dejan presagios de belleza y esperanza...Y en tu caso os dejó un regalo, que nunca olvidaréis y cada vez que aparezca esa mariposa, sabréis que él sigue cerca de vosotros, amigo...El haikú es una preciosidad, nos recuerda, que todos somos "polvo de estrellas" y estamos conectados al universo a través de la energía del amor...Mi felicitación y mi abrazo inmenso por tu buen hacer, amigo.
    M.Jesús

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  14. Hola Pepe, es precioso lo que nos cuentas.
    Sinceramente es maravilloso con la naturalidad que lo has contado.
    Tal vez el significado de esa mariposa fue que tu hijo ya era libre y volaba en libertad. Dejó el dolor pero vuela sintiéndose libre. Además os transmitió esperanzas con el vuelo de esa mariposa que se posó en la mejilla de tu esposa. Es hermoso pensar así porque el dolor es un poco más suave a pesar de la perdida tan grande.
    El haiku también muy bello.
    Saludos y abrazos

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