LA PLAYA
La playa es conjunción de mar y tierra y yo,
observador privilegiado, emocionado voyeur de esa entrega amorosa, de esa cópula
eterna, intemporal, de esa íntima unión de dos inmensidades.
Amante de ida y vuelta, deja el mar en cada
una de sus mansas caricias o bravas embestidas, un ribete de espuma salobre allá donde termina el lúbrico beso que los une.
Es variable el mar cuando se entrega. Si tierno,
su sonido se asemeja al de un mantra budista, llega con dulzura y se retira mansamente. Si enardecido
por la pasión, su sonido se vuelve gutural, profundo, desgarrador y se alza
altivo, vigoroso, copulando con fuerza desmedida.
Porta el mar en su vientre conchas y
caracolas que en cada beso derrama sobre la superficie de su amada. El sol y la luna, testigos de ese amor eterno iluminan
cómplices el torso de los amantes con llamaradas de fuego y resplandores de plata. Yo, afortunado espectador, cerca de la orilla, no puedo evitar sobrecogerme siempre e incluso llorar a veces, ante la inmensidad de la belleza que
contemplo.
Más playas infinitas en el blog de nuestra amiga Sindel
Me ha gustado esa imagen de ser "voyeur" de los amores entre el mar y la playa.
ResponderEliminarExcelente!!! Nada como ir a la costa y deleitarse con el sonido del mar, y el viento. Perfecto parala inspiracion y para aliviar el stress. Gracias por compartir.
ResponderEliminarPrecioso !! maravillosa pintura de tu may y tu playa. ¡me encantó!
ResponderEliminar"... su sonido se asemeja al de un mantra budista
llega con dulzura ... y se retira mansamente ..."
BELLISIMA FIGURA !.
Besos del alma.
¡FELIZ DIA !
no se si será un delito grave, pero cuando puedo me traigo un caracolito (chiquito..) para tocar un poco alguna playa lejana que me contó secretos cuando vuelvo y la tengo lejana. Me confieso también voyeur como vos. solo que no lo digo tan bien ;)
ResponderEliminarbesos
es tan cierto, uno se sobrecoge frente a la inmensidad de sensaciones que despierta. Como un amante eterno.
ResponderEliminarLindisimo texto.
Un abrazo :)
Precioso poema, Pepe. Una excelente metáfora para hablar del encuentro del mar y la playa. Yo lo intenté y abandoné por no lograr toda la expresividad que quería, así que te felicito porque tú has conseguido un bellísimo poema.
ResponderEliminarAl final opté por la prosa.
Un abrazo.
Fanny, siento decepcionarte, pero no es un poema, no. ¡Ya me hubiera gustado a mí!, prosa poética si acaso, pero gracias por considerarlo así.
EliminarUn abrazo.
Cuántas sensaciones e imágenes que despiertan las playas, esa mezcla de mar, arena y viento conforman tantas cosas, depende del estado de ánimo del espectador es la historia que trenzan.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
El mar, como la luna, son receptores en los que proyectamos nuestros íntimos sentires Pepe. ¡muchos saludos!
ResponderEliminarEn el mar volcamos tantos pesares y éste nos devuelve tanta belleza.
ResponderEliminarSensual unión.
Un par de besos y los dos cafelitos.
Preciosa definición de estos amantes.
ResponderEliminarUn abrazo
La pasión del mar, su erotismo, se vierten entre tus letras de espectador seducido, y es que es difícil no sentirse afectado por su encanto y ese devaneo continuo de olas y espuma, de sonidos, de brillos de vida marina. Precioso texto Pepe!
ResponderEliminarBesos!
Gaby*
Pepe, me encantó tu aportación a la propuesta de Síndel, amigo...Me gusta esa profundidad, que se hace mar y tierra en un sentimiento de inmensidad humano y divino.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu buen hacer, compañero de letras.
M.Jesús
Hola Pepe, precioso lo que dices de la playa, del mar.
ResponderEliminarMontones de metáforas bailan al son de las olas.
Muy bello y todo cierto.
Saludos y un abrazo