Sentía un dolor insoportable en la pierna. A
duras penas consiguió liberarla de un trozo de viga que la aprisionaba. Hace tan
sólo un momento estaba plácidamente dormido en su habitación. Un tremendo
temblor primero y un estruendo espantoso después, antecedieron a su situación
actual, casi asfixiado por el polvo, bajo toneladas de escombros y hierros
retorcidos.
Al fondo de un estrechísimo túnel que la casualidad
y la diosa fortuna habían permitido entre tanto desastre, la luz. La luz al
final del túnel. Hacia esa luz había comenzado a arrastrarse penosamente, en
busca de la libertad, de la remota posibilidad de vivir, cuando a su mente
acudió la idea que le hizo detenerse en su penoso progreso hacia la luz. Esa
luz y ese túnel… había oído muchas veces hablar de ellos. En los momentos que
preceden a la muerte muchos que han conseguido superarlos y vivir, hablan de
esa luz blanca que los atrae poderosamente como un imán. No quería morir, no
quería avanzar hacia esa luz que lo llevaba al otro lado de la puerta, por eso
se detuvo y retrocedió lo poco avanzado.
Cuando rescataron su cuerpo, ya sin vida, los
bomberos no acertaban a comprender que le impidió alcanzar el exterior del
edificio derruido. Había muerto de asfixia no hacía mucho. Tan sólo una pierna
rota no era impedimento suficiente para haber salido por sus propios medios.
Podeis visitar más túneles en el blog de nuestra amiga: Charo
Qué terrible, en esos momentos no se es muy claro en lo que se debe hacer.
ResponderEliminarAbrazos.
Que trágico. Confundió la luz del exterior, donde debía ir para salvarse, con la luz del más allá.
ResponderEliminarDicho de paso, parece ser que esas experiencias son falsas, son síntomas de que el cerebro se "reinicia".
A veces nuestra mente nos juega malas pasadas, y eso es lo que le debió pasar al pobre.
ResponderEliminarBuen relato
Un abrazo
Siempre LUZ. Sin luz no hay vida
ResponderEliminarBesos
jejee muy buen relato, lamentablemente con final trágico para el personaje que, por miedo, no se animó a intentar salir por sus propios medios.
ResponderEliminar=)
El terror que produce la muerte, mucas veces nos lleva a ella irremediablemente.
ResponderEliminarPudo más el miedo que la razón. Muy bueno Pepe.
ResponderEliminarUn beso para ti y para Toñi.
Excelente relato, su miedo pudo más que su esperanza. De una forma o de otra terminó como tanto temía.
ResponderEliminarUn abrazo.
Oh Dios, pobre hombre. Momentos angustiosos en los que muy pocas personas los saben controlar. Espeluznante relato.
ResponderEliminarSaludos
que terrible final, ¡felizmente estuvo iluminado! UN ABRAZO
ResponderEliminar.Le pudo el miedo a lo desconocido para él, en ese momento, pero mejor siempre la luz, sea como sea.
ResponderEliminarBesos.
Dicen que mueren personas sanas por falta de ganas de vivir...
ResponderEliminarUn besote al cubo.
Ostras Pepe! Me has dejado muy impactada con tu relato, no me esperaba ese final tan trágico. Qué ironía , fue el miedo a la muerte lo que le impidió hacer el más mínimo esfuerzo para vivir. Excelente!
ResponderEliminarMuchas gracias por participar. Un beso
La luz liberalizadora, esa luz que todos queremos alcanzar que está siempre al final del túnel, y que nos hace sacar fuerzas de donde no las hay. Pobre al final no lo consiguió. Un besote
ResponderEliminarPobre, encontró la muerte intentando huir de ella, paradójico, no siempre caminar hacia la luz es malo, tu relato es una buena prueba de ello.
ResponderEliminarBesos!
El miedo paraliza la mente, miedo a esa luz final que cuentan algunos...Pobre.
ResponderEliminarUn beso
Ohh! pero que mala suerte! que equívoco fatal! algunas luces no hacen mas que cegar la realidad
ResponderEliminarBeso amigo
El pobre se hizo caso de las leyendas urbanas y murió. Me quedo con que la imagen que vemos antes de morir es demasiado personal de cada individuo y que no se puede generalizar con lo típico de la luz como al final de un túnel. Muy bueno el relato Pepe!
ResponderEliminarUn abrazo
has descrito la distorsión de la realidad por anticipación, no, por anticipación no, sino por causa de dar más importancia a ideas preconcebidas, las cuales cobran realidad ante el personaje por mor de su pánico. cuando distorsionamos la realidad con precogniciones, quizá esta juega con nosotros de una forma tal como ha jugado con el cadáver de este personaje tuyo, cobrándole la vida.
ResponderEliminarmedio beso.