Llevaba dos días sin saber de ella. Demasiado
tiempo para quien tiene las mariposas en el estómago que provoca el primer amor.
Una amiga común me dijo que estaba en cama indispuesta y me propuse verla como fuera,
a pesar de que nuestra relación no podía ser calificada ni tan siquiera de
amistad en aquellos días.
Podría haberle llevado flores, bombones o un
perfume, pero me parecían insuficientes. Quería para ella un regalo que le evocara olor
a marisma y brea, a pan recién horneado, que trajera hasta su cama la dorada
arena y el mar azul, que la hiciera volar acompañando el raudo vuelo de las
golondrinas, algo que la hiciera sentir el aleteo de miles de mariposas de
vivos colores o el frescor de la hierba húmeda de rocío, algo que la sumergiera en un remanso de paz.
Un libro leído por mí por aquel tiempo, me
trajo la respuesta sobre qué regalarle. Ella era –sigue siéndolo- suave,
tierna, dulce y a la vez dura y fuerte como una roca, al igual que el
protagonista del libro que me dispuse a regalarle en mi visita. Un libro para
adultos escrito con una hermosa prosa cercana a la
poesía, que por su lenguaje sencillo pareciera escrito para niños. Como
anécdota, me sorprendió que hace tan sólo dos años, una amiga muy querida, al
conocerla por primera vez, la bautizó con el mismo nombre del protagonista de ese libro.
Tal vez la viera como yo la ví, como siempre la he visto. Así que fui a
visitarla llevándole como obsequio PLATERO Y YO de ese genial escritor que fue Juan
Ramón Jiménez.
Desde la distancia, cuarenta y dos años
después, creo que fue un acierto. Por ese motivo quiero compartir con vosotros mi
recuerdo personal de este libro que
recomiendo encarecidamente a quien no lo haya leído.
Uy ! qué ganas me han dado de releerlo...
ResponderEliminarPude imaginar ese período de pausa obligada de tu amiga, que elegiste enriquecer con esta huella imborrable!
Un acierto seguro Pepe, un acierto ese Platero peludo y suave, tan blando por dentro...algodón y rosas, y perfumes desde entonces os acompañan y la voz de los poetas, cantaría alegre, vuestro amor admirable.
ResponderEliminarBesitos y a Toñi.
Yo recuerdo a mi profesora leyendo Platero, y no se si fue por ella o por Juan Ramon que es una de esas imagenes tan antiguas pero que no se olvidan. Ese libro, estoy seguro, fue el mejor regalo posible. Un saludo.
ResponderEliminarNada mejor pudo ser, y sí cuando la conoces es tal como la describes. Cuarenta y dos años no son nada cuando se es feliz.
ResponderEliminarUn abrazo Pepe.
Ya estoy pensando en regalar "Platero" a todas las chicas que vaya conociendo a ver si consigo un pleno al 15 como el tuyo, Pepe. Jajaja. Enhorabuena por compartir la vida con esa mujer tan especial y por el relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿así que fue con Platero y yo como te el acercaste?...vaya! sabrás que para mí ese libro me trae recuerdos frescos de mi sexto grado de la primaria. Durante ese año la maestra que teníamos lo utilizaba como base de nuestro aprendizaje en lenguaje, así que no sólo lo leíamos, sino que además lo memorizábamos para hacer luego auto-dictado. Si te digo que el primer capítulo aún lo sé de memoria no te miento!
ResponderEliminarun abrazo y gracias por los recuerdos que me has traído!
No lo he leido; pero supongo que debe ser precioso. y a ella le debió de encantar,acertaste de pleno y seguro que aun se acuerda. El mejor regalo que le pudiste
ResponderEliminarhacer.
Un abrazo
Como olvidar a Platero, y que bien en recomendarlo.
ResponderEliminar"todo se veía distinto cuando ocurrió el eclipse, el mar parecía blanco..."
Precioso recuerdo y que me han dado ganas de releerlo.
Un abrazo.
Hola, Pepe.
ResponderEliminarMe ha encantado la forma en que nos has presentado a "tu primer amor". Y, leyéndote, demuestras que sigues enamorado hasta las trancas de aquella joven con la que tienes la inmensa suerte de compartir vida.
Un fuerte abrazo para los dos.
Lupe
Me fascina muchísimo más como llegaste a la elección del libro...y me fascina como lo relatas. Tienes una sensibilidad realmente sin limites, Pepe.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Un fuerte abrazo.
Ese libro es muy conocido.
ResponderEliminarMe gustó tu historia, de querer impresionar a alguien con un libro. Lo del primer amor tambien se da en historias de ciencia ficción, es uno de los temas del genero.
Incluso en la historia que escribi hay algo de eso.
Amigo Pepe, si que lo he leido, y lo tengo, es un libro emocionante y de una ternura exquisita. Juan Ramón Jimenez, desgraciadamente, está hoy injustamente muy olvidado.
ResponderEliminarSabes yo tambíen uno de los primeros regalos (no recuerdo si el primero) que le hice a mi novia, hoy mi mujer, fue un libro, en mi caso fue El Principito, recuerdo que se lo dediqué y le subrayé las frases que quería recalcar. Aun conservamos ese libro.
Encantador lo que nos has contado Pepe.
Un abrazo para tí y para Toñi.
No tanto el libro sino lo que significa es lo que me ha emocionado mucho.
ResponderEliminarEl primer libro que me regaló mi chico fue un Mortadelo...
Besos a los dos y cafelito.
Bonito recuerdo, reflejas esa ilusión de ese tiempo en que se ama y aún no se sabe si se es correspondido y puede el amor sobre las dudas y vas a llevarle un regalo.
ResponderEliminarUn abrazo, Pepe.
No he leido a Platero y yo, pero lo leeré. Un recuerdo precioso.
ResponderEliminarUn abrazo
Lola
Llevas razón al recomendar ese libro es tan poético y escrito con tanta sensibilidad que sin duda elegiste bien el regalo. Ella se pondría muy contenta.
ResponderEliminarMe alegra conocerte a través de este recuerdo.
qué bello acierto!
ResponderEliminarPlatero es pequeño, peludo, suave..., quién no sabe de memoria este comienzo?
brindo por esos 42 años!
Se puede haber escrito un libro con más ternura hacia un animal??Imposible!!Juan Ramón Jiménez. único y universal,que habla de su compañero..Platero..Y después de leer este libro ,cuando ves un burrito,ya no es lo mismo,dentro que ya de por si te gustan los animales,con esta historia tan dulce,pasa como con lo mismo que con Disney,que supo sacar los rasgos de personalidad de toda la naturaleza de 4 patas,y convertirlos no en humanos,porque dejamos mucho que desear..si no en seres entrañables..ayyy!! si como tu entrañable!!Un beso Pepe!!
ResponderEliminarBueno, he leído la joya que nos presentas: una obra de arte, sin lugar a dudas.
ResponderEliminarPero también he leído tu relato. Verás, entiendo de manera profunda el sentido y el cariño con los que vistes tus letras, en mente, la mujer amada sin la cual no somos nada. Me pasa lo mismo, y creo que es un regalo del cielo. Sí señor.
Un abrazo
Un libro tierno y poético que hemos leído casi todos los niños en el colegio.Recuerdo que las monjas nos llevaron de excursión a la Rábida y a la casa museo de Juan Ramón Jiménez, lástima que entonces no apreciáramos lo que estábamos visitando. Me encanta ese amor tan grande que muestras hacia Toñi. Dale un beso de mi parte y otro para ti.
ResponderEliminarRegalar un libro siempre es muy buen regalo claro creo y supongo que para hacerlo hay que conocer muy bien a la persona
ResponderEliminarPepe me encanta leerte porque todo lo que contás está tan pleno de amor, de admiración hacia la otra persona.
ResponderEliminarLeí el libro en la escuela, fue uno de los primeros que llegó a mis manos, nunca más lo volví a releer, quizás por mi avidez a leer cosas nuevas, pero me diste tremendas ganas de releerlo.
Un abrazo enorme.
Quién no recuerda a PLatero y yo. Hermoso texto que me remonta a la juventud, época en que lo leí. Aún hoy tengo ese viejo libro y cada tanto repaso algún capítulo.
ResponderEliminarSaludos.
mariarosa
Aunque dices que apenas os podíais considerar amigos, creo que la conocías muy bien. El hecho de regalarle un libro que creías era fiel a su personalidad, lo demuestra. También dice mucho, y bueno, de ti.
ResponderEliminarUn abrazo
Fue leer "suave" y listo! pensé en Toñi y en Platero.
ResponderEliminarQué amor Pepe!!! qué amor...
un beso a los 3 (por Platero, vió, yo también lo quiero mucho)
Aprovecho esta entrada, para justificar, si cabe, mi seguimiento expreso (antes anónimo) a vosotros Toñi y Pepe, Platero y Yo. Recuerdo que un profesor en la universidad, al comenzar un taller nos dijo: para aprender a escribir con el corazón, bastaba leer "Platero y Yo" Ahí comprendí que el saber y el sabor es inocente y limpio. Como veo que lo es vuestro amor.
ResponderEliminarCon todo aprecio,
Esther P.
Pepe:Un poco tarde,pero llego.A veces no puedo comentar a todos.
ResponderEliminarEL "poema"que has escrito es delicioso.Veo a una tierna mujer sobre la hierba y me recuerda esa dulce mirada,ese impulso de caricia.
Creo que tu libro fué un regalo pleno.
Por cierto,no sabía que Platero trajera tanta historia detrás y .....me alegra tanto!!
Parece que a los poetas , las musas se les cruzan alguna vez .
Besucos a los dos!!
Gó
Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos...
ResponderEliminarCiertamente tu amiga acertó!
El relato es tierno y hermoso,como ella. El libro.., tengo sentimientos contradictorios. ES hermoso sin duda, pero no sabes el mal que hace a veces la escuela.., es de esos libros que te obligan a leer sin tener en cuenta que aún no tienes edad para leerlo, que no estás en el momento adecuado para leerle.
Más adelante en el tiempo, leí algo del libro y fue distinto, al leerlo, fue como si me acabara de levantar de una nube y fuera flotando por el aire.. :-). Pero fue hace muchos años, y se que es triste el libro, eso si lo recuerdo y que quería llorar. Quizá lo vuelva a leer de nuevo. Si.
Un beso
del
Aire
Nunca leí ese libro... Se van acumulando los libros que tengo que leer, así pienso en cada uno de los que se han nombrado este jueves. Me dan ganas de hacer y sentir esas nuevas historias que se cuentan. Un saludo. Me parece que este es un relato con muy linda historia por detrás!
ResponderEliminarLo prrimerisimo, que hermosa es Toñi, dale un beso de parte mía, lo segundo, razón tuvo nuestra Nadi (Go) en llamarla asi por lo tierna que se ve, tercero, me alegra que ese amor perdure y que sigan creciendo juntos cada día. Un fuerte abrazo amigo mio, ya sabes que cuando vengo es por algo, a leerte avidamente y me voy contenta de mi tiempo empleado en ello!
ResponderEliminarAnny