Las manos son los apéndices ejecutores del pensamiento humano. Pueden crear, generar riqueza, construir, arar la tierra, acariciar, así son las manos puras, pero con la misma intensidad pueden maltratar, herir, matar. atesorar arrebatando aquello que nunca produjeron, bendecir en nombre de alguien en el que nunca creyeron, manos que ya nacieron sucias y que merecerían ser arrancadas. Las manos, en definitiva, son capaces de dar vida a lo mejor y peor del corazón humano.pero en ambos casos son sólo meros instrumentos al servicio del hombre y es a este a quien le compete la responsabilidad de sus accciones.
Más historias de manos en el blog de nuestra amiga Sindel
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Creo que mi comentario se ha borrado
ResponderEliminarAyudan a materializar el pensamiento, creador o destructor.
ResponderEliminarComo toda herramienta, depende de como se usa.
ResponderEliminarMe gustó mucho leerte en esta completa descripción
besos
Sabias reflexiones que nos muestran el gran potencial que tenemos gracias a la combinación de voluntad y posibilidades. El cómo y el qué depende de nosotros.
ResponderEliminar=)
Completamente de acuerdo con tu texto Pepe, todo depende de quién sea el dueño de esas manos, puede construir o destruir.
ResponderEliminarExcelente aporte compañero!
Un abrazo inmenso.
Sí, Pepe, todo, o casi todo "está en nuestras manos", pero en manos que actúen unidas.
ResponderEliminarBuenas reflexiones, Pepe.
Un abrazo.
es verdad, todo esta en nuestras manos. saludos me gustó conocer tu blog
ResponderEliminarEs verdad Pepe. Somos los únicos responsables de nuestras acciones.
ResponderEliminarSería bueno que el mundo que dejemos a nuestros hijos y a nuestros nietos sea mejor que el que estamos transitando. Pero todo depende del HOMBRE.
Un abrazo gigante.
¡Feliz finde !
En nuestras manos está la mente y el corazón...Nuestro mundo está en nuestras manos, por tanto debemos cuidarlas mucho...Mi felicitación y mi abrazo inmenso por tu buen hacer, Pepe.
ResponderEliminarM.Jesús
Hola Pepe, muy bueno lo que dices. Tienes razón, las manos son la herramienta para hacer el bien, o el mal.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo
Las manos me fascinan. No todo el tiempo. Son épocas. A veces me da por fijarme en ellas. Tienen algo mágico, con esa destreza en la manifestación de pensamientos y sentimientos, con esa capacidad de amar y de maltratar a la vez.
ResponderEliminarUn beso
del
Aire Ausente