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23 de enero de 2024

Convocatoria literaria. Este jueves un relato: LA LUZ OCULTA DEL FARO

 


Mientras comienzo a escribir este relato, no puedo evitar acordarme de una buena amiga bloguera de los jueves literarios, Leonor, a la que tuve la enorme fortuna de conocer en persona, gran amante de los Faros. Creo no equivocarme si digo que llegó a visitar gran número de ellos, disfrutando en cada una de esas visitas. Estoy seguro que de estar entre nosotros, escribiría un gran relato, como siempre hizo.


Querida Patricia:

FACTA NON VERBA

“Hechos, no palabras”, esa es la frase que, junto a un sangrante corazón, con rabia incontenida, dibujé en la pared interior de nuestro amado faro, ese que sabía de nuestras confidencias, de nuestras caricias, de nuestros adolescentes escarceos amorosos, ese que fue testigo mudo de nuestras promesas de amor eterno.

A mi vuelta de la Universidad, con los estudios terminados y mis ilusiones intactas, me enteré.

No habías tardado en anteponer los hechos, tus hechos, a las palabras de amor tantas veces pronunciadas.

También me enteré que no fue una buena elección por tu parte. No duró mucho tu felicidad. Supe de los maltratos físicos y psíquicos a los que te sometía aquel que ocupó mi lugar en tu corazón.

Me sublevaba esa situación. No podía verte sufrir. A pesar de lo ocurrido y de mi frustración inicial, te seguía amando, de hecho, aún te amo.

La noche en que todo sucedió, nuestro viejo faro, ahora polvoriento y en desuso, aún funcionaba guiando a los barcos hasta el puerto con su potente luz . Tu maltratador, no puedo llamarlo esposo, había salido a navegar. No fue difícil provocar el apagón del faro causante del naufragio que acabó con su vida y con tu sufrimiento.

En nuestro viejo faro, una nueva frase en la pared :

QUI SEMINAT VENTOS, TEMPESTATES METIT  (Quien siembra vientos, recoge tempestades).

Nadie fue capaz de relacionar el apagón del faro con un homicidio intencionado. Tú lo estás sabiendo ahora, cuando estoy a punto de llegar a mi estación término, aunque pienso que tal vez pudiste llegar a sospecharlo.

No sé porqué te escribo, tal vez porque no puedo llevarme conmigo tanto peso en la mochila, pero tampoco quiero que te hagas responsable de unos actos que no te competen. Casi seguro que añadiré un peso sobre tu conciencia, pero también sé que sabrás qué hacer .

Hasta siempre, con amor.

Más relatos en torno al anterior párrafo en cursiva,  en el blog de nuestra amiga Mag



19 comentarios:

  1. Vuelves a los jueves y vuelvo también yo siguiendo tu estela y, ¡Menuda estela!
    Impactante, breve y completo relato.
    Un abrazo de esos de cada jueves, aunque si me permites, dada la ocasión y que aún sigo bajo la influencia de la fuerza de tu relato, más cariñoso aún.

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  2. Una carta que sin duda ella tal vez la sorprenda o quizás la esperara.
    La conciencia del protagonista al menos quedo saldada.
    Un abrazo

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  3. Es el primer relato que leo de esta convocatoria y me ha encantado la carta y y la forma que has usado para contarnos que a veces hay que tomar una decisión. Abrazos

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  4. Esa carta es muy buena. El apagón fue una liberación para el hombre que la amaba, para ella seguro que mucho más.

    Me gustó mucho. Un abrazo

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  5. Hola Pepe. Me has emocionado doblemente, primero por tu evocación de Leonor, de quien no tenia noticias y ahora me llegan éstas, lamentablemente. Tu recuerdo llegará hasta ella, esté donde esté.
    Seguidamente la emocion me llega por la desazón de ese narrador dolido que ha perdido a su amada justamente en el viejo faro donde se encontraban en su juventud. Recurso desesperado al que acude para dejar grabado su dolor latente.
    Un fuerte abrazo.

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  6. Desde luego, es una astuta forma de asesinar sin dejar rastro. La venganza es siempre ese veneno que corroe por dentro y que empuja a
    cometer los actos más atroces, en este caso con gran sutileza.
    Un escrito con una narración muy fluida que invita a su lectura con cada palabra.
    Enhorabuena.

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  7. Hola, Pepe: siempre se confiesan las cosas antes de morir, ¿por qué será? Y apagar un faro, uffff, eso es lo peor. Menuda confesión...
    Un abrazo. :)

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  8. Muy original y me han gustado mucho esas frases en latín que explican en pocas palabras el origen de los hechos que suceden en el relato.
    Un abrazo

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  9. Un recurso desesperado de justicia vengativa, que tuvo víctimas inocentes.

    Emotivo recuerdo.

    Saludos.

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  10. Hola Pepe.
    Quien siembra vientos, recoge tempestades.
    Una verdad como un templo.
    Y después hizo justicia con un ser despreciable que maltrataba a su mujer. Buen micro, tan real como la vida misma. Un abrazo

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  11. Ese refrán es muy sabio. Con una mochila así el descargo de la conciencia deja muy tranquilo. Buena aportación. Saludos!

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  12. Hola Pepe, al leer tu referencia a Leonor, me has emocionado, por ese cariño que este donde este, está. Gracias por ello,
    Nada mas penoso es que maltraten a un ser amado, ya sabemos como termina eso casi siempre, y mas ahora que por suerte sale a la luz, no debería pasar, esa es otra realidad. Así que en verdad no me apena para nada el destino de ese sujeto.
    Me encanto como lo cuentas,
    Un abrazo:)

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  13. Hay mucha gente que tiene verdadera devoción por los faros, son tan majestuosos! Y todos seguro que guardan interesantes historias acumuladas durante tantos años ejerciendo de vigilantes! En tu historia, el enamorado decide con la ayuda del faro, actuar para proteger a su amada, aunque ella estuviera con otro que no la merecía! Un abrazote!

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  14. Me ha gustado mucho tu carta - confesión, realmente dura historia, muy bien contada.
    Saludos y buen fin de semana.
    PATRICIA F.

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  15. no puedo decir que eres sangre fresca en los blogs por que formas parte de esa primera generación de los jueveros de hace ya...muchiiiisimos años, Tu historia aclara un suceso que se mantuvo oculto por años y un final de justicia Un abrazo

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  16. jajja.. muy bueno el segundo latinajo, muy oportuno. y el primero muy profético.
    No poder ir a por ella después del asesinato, dice algo, solo un poco, en su favor.
    Abrazooo

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  17. De regreso y con la fuerza e intensidad de siempre, un placer disfrutar de tus letras, de tus historias con una realidad aplastante. Citar a Leonor ha sido traerla de nuevo junto a nosotros, un recuerdo lleno de cariño compartido.
    Sigamos caminando Pepe.

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  18. ¡Hola, Pepe! Qué alegría volver a saber de ti. Hacía muchísimo tiempo que no coincidíamos.
    Me alegro de que el tema de esta semana sirva como pequeño homenaje a tu amiga Leonor.
    He leído varias confesiones cuando el protagonista está a punto de irse para el otro lado. Creo que los cargos de culpa pesan demasiado en el alma.
    Millones de gracias por este texto con tanto sentimiento. No se necesitan más palabras.
    Un beso enorme y, bienvenido.

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