Hoy, 14 de Julio es un
día muy especial para mí. Un día imposible de olvidar. Un amigo me
invita a escribir, precisamente hoy, sobre el olvido. No podría, hoy
no, escribir sobre ese tema. Todas mis emociones, esas que conducen
siempre mi pluma sobre la página en blanco, me incitan a escribir
sobre el imposible olvido, sobre las cosas imposibles de olvidar y
especialmente sobre nosotros y un acontecimiento que cambió nuestra
vida para siempre, tal día como hoy, hace ya 42 años.
Hoy quiero escribir a
vuelapluma, sin apenas reflexionar sobre lo escrito, que fluya como
el agua de un manantial, fresca y sin remansos.
No me es posible olvidar
que en ese día, confirmamos ante el altar nuestra elección mutua
como compañeros de viaje. Tus pisadas junto a las mías, comenzaron
una senda nueva que nos ha traido felizmente hasta el día de hoy.
No me es posible olvidar
que casi todo lo bueno que pueda haber en mí, de tí lo aprendo, de
tu inmensa humanidad me contagio, de tu enorme corazón, de tu
calidad humana me nutro, de tu vitalidad y tus ansias de vivir, mamo.
¿Como olvidar lo que te hace vivir y respirar?.
No me es posible olvidar
tanta vida, tantas alegrías, tantos momentos compartidos. Es
imposible el olvido. Más imposible aún, olvidar tu mano en la mía,
mi mano en la tuya, cuando la desesperación de una inmensa pérdida
hizo especialmente necesario un apoyo mutuo, una amorosa entrega que
nunca nos faltó.
Mi vida a tu lado ha sido
y es, un ligero soplo de aire fresco, un momento fugaz, un luminoso
instante, un cortísimo trayecto a pesar del tiempo transcurrido,
desde que nos prometimos fidelidad y amor eterno.
Hoy no, Toñi, hoy no es
el día para escribir sobre el olvido. Hoy el imposible olvido me
lleva a escribir sobre tí, sobre mí, sobre nosotros, me lleva a
expresar torpemente, porque no hay palabras, mi amor por tí y mi
gratitud porque estés en mi vida, compañera del alma, compañera.
Seguramente otros sí que
habrán escrito sobre el olvido en casa de nuestro amigo, ese del medio beso,
GUSTAVO
En el amor no hay olvido... nunca. Y el vuestro es muy intenso.
ResponderEliminarBesos!!
Precioso amigo. Un amor incondicional, un amor para toda la vida. Felicidades a los dos.
ResponderEliminarUn abrazo
Mi querido Pepe, ese amor es ejemplo para todos! Que os quiero lo sabéis, que os admiro y respeto de sobras y que siempre consigues que se desborde el mar por mis pestañas al leerte también lo sabes y eso que las sirenas NO LLORAN joper! Que no puedo venir a tu casa, pero claro, veo fotillos vuestra, tan bonita estampa y no me resisto! Ríete tú de los cantos de sirena, vuestro amor y tus letras son un atracción irresistible. Miles de besosssss a los dos...
ResponderEliminarMe has hecho emocionar, eso si que es amor y de los grandes! Felicidades a Toñi y a ti, no esta claro que no es un dia para escribir sobre el olvido. Precioso escrito, besos a los dos.
ResponderEliminarEnhorabuena, es precioso lo que has escrito, os merecéis el uno al otro. Un abrazo
ResponderEliminarOooooooo que bonito... ¡Felicidades!
ResponderEliminarMe emocioné muchísimo leyendo estas palabras tan frescas, salidas desde el corazón y tan profundas. El amor, es esto que tan bien cuentan tus letras, no existe mejor definición. Los felicito por todos esos años de aprendizaje, compañía y sostén! Qué sean muchísimos más. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarTu texto me ha emocionado y, por qué no confesarlo, me ha dado envidia...sí, tengo otro amor igual de intenso en mi vida por mi hijo pero nunca he tenido un amor de pareja así...y lo echo de menos...Tengo la suerte de haberos conocido y de haber comprobado ese amor, porque eso se nota amigos. Espero que sigáis juntos muchos años y que os sigáis queriendo tanto!
ResponderEliminarUn abrazo enorme para los dos.
Ayer hablaba con una amiga de lo difícil que es encontrar un compañero de viaje que lo sea de verdad, tal y como lo describes tú. Me alegra comprobar que sólo es eso, díficil, no imposible.
ResponderEliminarUn abrazo con mis mejores deseos de felicidad para ambos.
¿Olvidar a tu mejor compañer@ de viaje? Jamás, si acaso los pasos para volver a andarlos.
ResponderEliminarBesitos.
Es la luz que rompe todo olvido, todo un empuje hacia el ser. Un texto muy emotivo. Saludos.
ResponderEliminarPues yo os felicito a ambos por no querer olvidar.Un beso.
ResponderEliminarCuánto amor destilan tus palabras, Pepe, logras emocionarnos haciéndonos sentir parte de todo eso que los une y sigue alimentándolos. Me alegra saber que sean tan felices!!
ResponderEliminarUn abrazo
Que lindo Pepe, como siempre, me has emocionado, ya habrá días para escribir sobre el olvido, pero ayer no, ayer tenías que recordar todo lo vivido durante tantos años. Felicidades con un día de retraso. Muchos besos para Toñi y para ti.
ResponderEliminarUna interesante forma de escribir sobre el tema, sobre la negación del olvido, de tener motivos para retener los recuerdos.
ResponderEliminarBien planteado.
Hermosa declaración de amor... y es que el amor, verdadero y fuerte no se olvida, jamás.
ResponderEliminarUn beso.
Hemos tenido mucha suerte, amigo mío, nuestros compañeros de viaje nunca formarán parte del olvido porque sería como olvidarnos de nosotros mismos, sin ellos no existimos.
ResponderEliminarUn beso a los dos. Os casásteis el día de mi cumpleaños, buena elección.
Pensar en el olvido es irremediablemente pensar en lo inolvidable. Una maravilla de amor; gracias por compartirlo. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminar¿Cómo olvidar a la persona que comparte contigo momentos de dicha y felicidad? ¿cómo olvidar el amor cuando es tan hermoso? imposible olvidar.
ResponderEliminarMuchísimas felicidades, Pepe.
Tu entrada me parece de lo más emotiva y hermosa.
Un beso.
Releo tu texto, Pepe y me dan unas ganas de borrar la palabra "olvido" del dcicionario...
ResponderEliminarQue ternura, que hermoso homenaje al amor.
Un a brazo a ambos