Esta es mi aportación a este relato encadenado:
Me encuentro en un punto muerto, en un callejón sin
salida. Debo de encontrar a la hermana Sonsoles y al mapa como elementos
imprescindibles para avanzar en la investigación. Me armo de valor y cruzo la
puerta. Al hacerlo, un escalofrío me recorre el cuerpo. Al otro lado, encuentro
el mapa en el suelo pero ni rastro de Sonsoles. Al lado del mapa, el lugar
señalado para cavar se me muestra rugoso, áspero, muy distinto de la superficie
brillante, lisa y pulida del resto del suelo de la habitación.
Siento la
imperiosa necesidad de situarme justo encima de ese lugar, una fuerza interna
me dice que sólo ahí, en ese punto, encontraré la respuesta que espero.
Este relato tiene su continuidad en el blog de Monserrat Sala
Importante: Para todos los que llegueis hasta aquí, os dejo el enlace hacia las últimas noticias del III Encuentro Bloguero en Córdoba, con el detalle de asistentes y actividades a desarrollar:
¡¡¡Ultimas noticias sobre el III encuentro bloguero!!!
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Buena noches, Pepe, ahora resuslta que la buena mujer, resulta ser hermana. La de giros que puede dar el relato.me encatará leerlo todos.
ResponderEliminarUn estilo resuelto el tuyo, con frases cortas y bien estructuradas, transmites mucho sin extenderte en demasía.
Ha sido un placer leerte.
Un abrazo desde la ventana.
Bueno, al menos ha recuperado el mapa, ya es algo. Ahora le toca reflexionar para juntar cabos.
ResponderEliminarUn abrazo
Ya sabemos dónde hay que cavar, o eso parece, a ver con qué se encuentra.
ResponderEliminarBesos...
Uy, uy, esto se pone tremendo... ¿Se lo tragará la piedra como a Sonsoles? Saludos cordiales.
ResponderEliminarAparentemente esa Sonsoles era un asunto raro, empezó siendo bruja, luego monja y ahora ha desaparecido! Pero bueno, Jenaro tiene el lugar exacto donde cavar, algo es algo, pobre hombre, al menos podrá develar todo este embrollo!
ResponderEliminarUn beso Pepe, la historia no deja de sorprenderme (de lo que somos capaces todos juntos, no?)
Gaby*
Comprobaremos qué hay debajo de ese suelo diferente.
ResponderEliminarun saludo
Lo dicho, esta historia sabemos dónde comienza pero ni idea de cómo acabará! jejejeej
ResponderEliminarTodo un delirio entretejido!
=)
Muy divertido!
Un abrazo
cuanta intriga venimos generando con los relatos! me fascina... a ver como sigue! un beso!
ResponderEliminarBueno, el mapa está de nuevo en sus manos. Pero esa zona rugosa del suelo no me gusta nada, ¿a ver si va a ser como el triángulo de las Bermudas y también desaparece Jenaro?
ResponderEliminarSigo camino antes de que eso suceda
Un beso
Mar
!Pepe! se lo hemos puesto muy peludo a Jenaro, pobrecillo y en ayunas a cavar ¿o qué? Me intuyo algo telúrico o es que también estoy en ayunas, culpa tuya y de la intriga misteriosa que has deslizado.
ResponderEliminarNos vemoooos, besitos.
Al final parece que el único que sobrevive entero es Jenaro, y todo el que pasa por su lado desaparece, incluida la mafia rusa.
ResponderEliminarEso si, el suspense sigue increscendo.
Cotinuamos la lectura intrigante.
Un abrazo
La que se está armando, ese pobre Jenaro de nariz de payaso metido en un extraño secreto y la gente a su alrededor que desaparece.
ResponderEliminarBesitos
A lo mejor ese punto distinto en el suelo es un agujero a otra dimensión. Habrá desaparecido por eso la monja?. Jenaro espera y al menos ha recuperado el mapa.
ResponderEliminarUn beso.
Vamos por partes que si no me lio. ¡Has dejado la historia súper interesante! A ver qué le sucede a Jenaro al ponerse sobre aquel lugar... ¿Encontrará la respuesta que busca? ¡Siga leyendo! jeje. Y ahora si, voy a hacer un descanso y a ver lo del encuentro de Córdoba, ¡que ya hay ganas! Un beso.
ResponderEliminarParece que Jenaro ya se pierde por aquí!! jaja y Sonsoles... ¿Dónde se habrá metido? jajaja, esto es muy intrigante... Muy divertido!!! Saludos,
ResponderEliminarMe sigue pareciendo que Sonsoles es una arpía y Genaro se va hacia el lugar exacto. Veremos qué pasa, sigo leyendo.
ResponderEliminarSaludos
Jenaro a punto de entrar en la cuarta dimensión??? Yo que el tiro el mapa y salgo corriendo!
ResponderEliminarun abrazo
Jenaro anda un poco perdido desde que desapareció Sonsolés, no? Creo que me he metido tanto en el relato que ... estoy perdida?? Jajajaa. Que divertido...
ResponderEliminarUn beso.
Jenaro está a punto de un infarto, Sonsoles que no, el mapa que tampoco, te dejo que voy a ver si los encuentro jajaja.
ResponderEliminarBesos.
Me pregunto que habrá debajo de esa superficie diferente a todas. Qué intriga me dejas!!!
ResponderEliminarUn abrazo y sigo...
ños Pepe eres un cielo!!!! llevo perdida un rato visitando blogs y leyendo trozos de historia sin saber por donde empezar y sin enterarme de mucho jajaja. El besote empieza ahora mismo y........... ya XP.
ResponderEliminarMe temo que nos has dejado una salida un tanto esotérica... justo donde el suelo se hace rugoso,
ResponderEliminarJenaro lo tiene complicado ¿cavar o irse a tomar algo fresquito?
Que disparate tan interesante este que estamos construyendo entre todos.
Un beso, voy a seguir leyendo
jajaja..acabo de decirle a María Jesús que estabamos en punto muerto. Me tranquiliza saber que comprendo algo de esta genial historia!!!!
ResponderEliminarbesos y abrazos mil
recuerdo que alguna vez en spaces participe de un relato como este, bien, esta vez espero la publicacion del mismo en forma completa, por lo tanto no emito opinion al respecto todavia, lo que si comento es que espero que ese proximo encuentro sea tan y mas especial que los anteriores, no los conozco a todos pero siendo amigos tuyos yo los considero mios, un abrazo fuerte, estrechen esos bonitos lazos de amistad que hemos ido cultivando con el paso del tiempo, aunque lejos, muy lejos en distancia estare alli, cerquita en corazon!
ResponderEliminarAnny