La especie humana contempla una evolución de siglos con un paupérrimo resultado evolutivo. ¿Qué extrañas circunstancias confluyeron, qué locura transitoria aquejó a la Naturaleza para permitirnos aparecer y perpetuarnos sobre la faz de la Tierra?. Llevamos en nuestra carga genética la semilla de la destrucción. Resulta extraño que hayamos progresado como especie dado el afán aniquilador que nos caracteriza.
La Naturaleza está
siendo extremadamente paciente con nosotros. Vigilante, como madre
amantísima, desde una esquina de nuestra existencia, sigue confíando
en que sepamos encontrar el camino de la armonía que nos permita
crecer en paz con los de nuestra propia especie y con el resto de
seres vivos, frutos todos de su generosidad sin límites.
Desde nuestra debilidad,
hemos parido innumerables dioses a los que rendir, servilmente, idiotizada y
mediatizada pleitesía. En sus garras se acrecienta nuestra
debilidad, pero no somos conscientes de ello. Es así como el poder,
el dinero, la fama, la religión, los fanatismos que pueden generar,
y tantos otros elementos nocivos, nos han convertido en lo que
somos..
Decía Groucho Marx, que
partiendo de la nada hemos llegado a las más altas cotas de la
miseria.
No le falta razón.
¿Seremos capaces de escribir algún día, con trazo derecho y sin
temblores, una historia distinta, donde quepamos todos como iguales?.
¿Seremos capaces de perseguir el bienestar ajeno con la misma
intensidad que el propio?. Las manecillas del reloj de la Historia
avanzan inexorablemente tambien para nosotros. Tal vez no quede
suficiente tiempo.
Podeis apreciar lo que las musas han inspirado a más compañeros ante la contemplación de esta imagen en el blog de nuestra amiga Sindel
Razón no te falta, es mucha la gente que destruye sin conocer a quien destruye, que aniquila sin conocer el origen, tampoco saben porque lo hacen, y esos son muchos. Pero existe una multitud mayor que ama y construye, que aprende y cura, que se entrega con decisión. Yo creo en ellos. Un abrazo
ResponderEliminarQuiero pensar que hay gente buena que escibe día a día otra historia diferente, aunque no se note, está ahí.
ResponderEliminarMuy buena reflexión, cargada de preguntas que aún no encuentran respuestas. No sé si seremos capaces, pero hay que intentarlo.
ResponderEliminarNo hay nada permanente; ni siquiera la barbarie.
ResponderEliminarMe gustó tu escrito. Un abrazo.
Pepe que texto!!! Tremendamente realista y que al lector lo deja en reflexión. Qué hemos hecho con nuestro mundo exterior e interior, sino destruirlo y empeorarlo! Creo que todavía queda buena gente que ha sabido combatir ese gen de destrucción, pero es tan poca que la esperanza de que se expanda es ínfima. Trataremos de ser optimistas, y confiemos en que las próximas generaciones podrán comprender que tienen que estar unidos, y combatir esta miseria en la que se ha sumido la sociedad.
ResponderEliminarTe aplaudo por este aporte, y me hace muy feliz que estés en mi propuesta. Gracias!
Un abrazo inmenso!
Pepe un texto para hacernos sentir vergüenza de ser como somos, la frase de Marx es una gran verdad. Lo peor es que cada vez estamos peor, somos seres destructivos. Me gustaría tener un poco de esperanza en las próximas generaciones.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Pepe: Vaya texto amigo. Deberias cambiar el nombre de tu blog. DESGRANANDO VERDADERAS
ResponderEliminarREFLEXIONES. Porqué todo lo que dices hace pensar y mucho. A mi me has conquistado,con tu escrirto de hoy.
Saludos cordialísimos.
Tremendo texto para reflexionar y esperemos que lo venidero sea menos mísero.
ResponderEliminarUn abrazo
Pepe, nos dejas un tema muy profundo...El hombre y su afán de destrucción, frente a la naturaleza, que acepta y espera...Pienso, que hay mucha energía positiva clamando al universo, muchos voluntarios y personas entregadas a los demás, que van dejando su huella...El cielo recoge lo bueno y lo malo y mientras ahí seguimos luchando con nuestra dualidad...Ojalá que nuestras letras y nuestros sentimientos no sean inútiles y logremos entre todos aportar nuestro grano de arena y mejorar nuestro mundo...Mi felicitación y mi abrazo por darnos siempre lo mejor, Pepe. Feliz año nuevo y mi ánimo siempre, amigo.
ResponderEliminarM.Jesús
Impresionante lo que has escrito, llega al alma, para concienciarnos y hacer del mundo algo mejor, pero desde nosotros mismos, desde cada uno, para poder mejorar todo mucho más, porque la caligrafía hay que mejorarla desde nuestro interior para poder plasmar lo que realmente debemos practicar.
ResponderEliminarMe ha encantado tu texto, sinceramente, Pepe.
Un beso.
Una reflexión muy acertada para estos tiempos tan revueltos. Imagino que son los menos, esos seres que no hacen otra cosa que derramar su enfermo propósito de manera sangrienta, pero son los bastantes como para herir toda gota de esperanza y fe en la humanidad. Vamos mal... lamentablemente.
ResponderEliminarBesos!
Gaby*
Has realizado una magnifica visión de algo muy real y que debería de servir para reflexionar y ser más consciente de todo lo que nos rodea.
ResponderEliminarBesos
Pepe nos dejas un tema con una bella vision. Debemos reflexion sobre la manera de conservar nuestro mundo y no destruirlo.
ResponderEliminarUn beso Pepe
Gracias por tu visita en mi blog
Isa